viernes, 22 de marzo de 2013

378. En qué modo puede afectar la alteración del cerebro sobre el Espíritu después de la desencarnación?



COMENTARIO EXEGÉTICO N° 378

©Giuseppe Isgró C.


378.   En qué modo puede afectar la alteración del cerebro sobre el Espíritu después de la desencarnación?
-“Dado que él no tuvo conciencia de todo lo que ocurrió durante su locura, necesita siempre un cierto tiempo para conquistar el dominio de sí mismo, para lograr lo cual cuanto más largo fue el lapso tanto más extensamente duran la pena y la angustia después de la muerte. El Espíritu, una vez separado del cuerpo, experimenta aun por algún tiempo las consecuencias de los vínculos que lo ligaban a la materia”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC:

No es tanto por la alteración física del cerebro por la cual por algún tiempo el Espíritu queda afectado después de la desencarnación, sino por el estado mental en que la persona encarnada se encontraba antes del deterioro de su cerebro y las condiciones espirituales inherentes de su Espíritu las que trascienden el órgano físico en sí, cuyo estado de alteración mental, las mayoría de las veces se deben al efecto de las facultades espirituales que precisan un mayor control en sus manifestaciones y a las pruebas de corte kármico que la persona trae a esa existencia, cuyas pruebas habrán de aportarle el aprendizaje necesario para impulsar la evolución de su estado de conciencia a un nivel jerárquico de mayor envergadura.
El grado de logro que el Espíritu haya alcanzado en su prueba terrestre determinará el de las condiciones espirituales que tendrá una vez efectuada la desencarnación, Si el Espíritu alcanzó el objetivo total que la prueba arrojaría o los entes espirituales que constituían la eventual causa de tal trastorno, o la pasión cuya exaltación provocó el trastorno físico-mental hayan alcanzado un grado de normalización, el Espíritu se habrá visto, después de la desencarnación, liberado de ese estado mental-espiritual, o más rápidamente o en mayor grado. Si la prueba no fue superada totalmente, o, el Espíritu no alcanzó el grado de armonía y equilibrio espirituales suficientes, en su siguientes encarnación, por efecto del philia, seguirá arrastrando las consecuencias de tal estado con manifestaciones tales como fobias, traumas, tendencias, actitudes, aptitudes, costumbres, idiosincrasias, rasgos físicos o del carácter.

No hay comentarios:

Publicar un comentario