COMENTARIO EXEGÉTICO 591
Giuseppe Isgró C.
591.
En los mundos superiores,
también las plantas como los demás seres, son de naturaleza más perfecta?
-“Todo es más perfecto; pero las plantas son
siempre plantas; al igual que los animales son siempre animales, y los seres
humanos, siempre seres humanos”-.
COMENTARIO EXEGÉTICO GIC
Son cuatro los reinos que coadyuvan a la
expansión de la Creación: el humano, el animal, el vegetal y el mineral.
El Espíritu humano, el del animal, el del
vegetal y el del mineral, son emanaciones a la conciencia individual a partir
de la Divinidad, sin separarse de la Divinidad y sin dejar de ser la Divinidad.
Poseen los atributos divinos de la Divinidad
y el poder creador en estado de potencialidad infinita.
La conciencia de cada Espíritu en los cuatro
reinos naturales es una réplica exacta de la conciencia de la Divinidad.
La Divinidad posee todos sus atributos
divinos, o valores universales, desarrollados en todas sus vertientes y
variantes en grado infinito.
Cada ser, en los cuatro reinos naturales los
posee en estado de potencialidad infinita. Son idénticos a los de la Divinidad;
pero, le falta la experiencia, que adquirirán en el eterno retorno del ser
individual al Ser Universal, o Divinidad, sin jamás alcanzar un límite, por
cuanto siempre se encontrará un más allá por el estado infinito de la
potencialidad.
Dónde se encuentra la superioridad de los
Espíritus de un reino sobre el otro, si en cada uno de los reinos es la misma
Divinidad la que se expresa, sin separarse de ella misma y sin dejar de ser
ella misma?
Cada reino coadyuva a la expansión universal
con funciones propias y equivalentes, adquiriendo la experiencia, o expansión
de la conciencia desde un grado cero de experiencia hasta el infinito.
Es decir, cada Espíritu, en los cuatro reinos
naturales avanza paralelamente en la expansión de la conciencia, o adquisición
de la experiencia, de importancia equivalente.
En fin de cuenta, la Divinidad es anhelo de
ser; cada uno de los seres, en los cuatro reinos naturales, es la expresión de
ese anhelo, y el instrumento de la voluntad divina. Cada ser emana perfecto a
la conciencia individual, por cuanto la Divinidad es perfecta, pero, repetimos,
le falta la experiencia.
La única evolución que adquiere es el
acrecentamiento del conocimiento por la expansión de la conciencia, que se manifiesta
como aptitud, es decir, capacidad de percepción, de comprensión y de
realización.
Paralelamente que desarrolla los atributos
divinos o valores universales, adquiere su perfección moral, por basar su
conducta, es decir: pensamientos, sentimientos, palabras y actos, en los
parámetros de los valores universales.
Esta pregunta Nº 591, y la Nº 172 de El Libro
de los Espíritus, aportan una visión para superar una matriz de pensamiento que
comparten todos las corrientes de pensamiento, y que es preciso superar, de que
el Espíritu del mineral evoluciona en el del vegetal, el del vegetal en el del
animal, y el del animal en el humano. Por supuesto, matriz de pensamiento que
respeto, pero, el Libro de los Espíritus aporta diversos elementos que permiten
aclarar este particular.
Empero, es preciso meditar al respeto libre
de la influencia de la matriz de pensamiento, para ver con claridad la
realidad.
Este es el fin del ejercicio, pero comprendo
que no es fácil saltar esa matriz de pensamiento, empero, es necesario percibir
a fondo las mismas enseñanzas que El libro de los Espíritus aporta para esclarecer
tanto este aspecto como incontables otros. De ahí su carácter de obra cumbre
del pensamiento universal.
Gracias al hermano Ruben y a la hermana
Viviana por participar en el diálogo, de por sí muy interesante.
***
Allan Kardec, definía al Instinto como un
grado rudimentario de inteligencia. Un grado "rudimentario" de
inteligencia es un atributo, o un grado de desarrollo que alguien posee, ese
alguien es el Espíritu: Mineral, o elemental de la naturaleza; vegetal, animal
y humano. Es la mejor percepción, o definición, sobre el instinto que hasta
ahora, de lo que conozco, he encontrado.
Mi análisis personal, cada vez me convence
más de que se trata de una conciencia perceptiva intuitiva, o inspirativa, o
por el uso de cualquier otra facultad espiritual, que cada uno de los Espíritus
de los cuatro reinos naturales posee.
Los Espíritus de cada uno de los otros tres
reinos naturales, poseen cada una de sus facultades espirituales funcionando
sin inhibiciones algunas, mientras que en el ser humano si existen dichas
inhibiciones en algún grado.
Por otra parte, cada uno de los Espíritus de
los otros tres reinos naturales posee su propio estado evolutivo, o expansión
de conciencia, que se manifiesta como aptitud: es decir, capacidad de
percepción, de comprensión y de realización: hacer o dejar de hacer.
Esto es el resultado de sus incontables
números de vidas anteriores cuyo progreso se manifiesta como un estado de
conciencia más desarrollado, o aptitud, o inteligencia más vivaz.
Los Espíritus Puros, como usted bien lo dice,
no necesitan reencarnar, pero no lo necesitan hacerlo por efectos de las
acciones kármicas, o de la ley de compensación. Empero, mi apreciación
personal, respetando, siempre cualquier otra percepción, es que sí necesita
hacerlo para desarrollar el plan divino que la Divinidad tiene para cada ser,
de acuerdo al propio estado de conciencia, o nivel de progreso alcanzado.
Seguramente, desarrollará sus propios proyectos en la creación de nuevos
mundos, en el desarrollo de civilizaciones en diversos mundos, o en la
cooperación en equipo en tales desarrollos u objetivos colectivos. Dirigirá
grupos espirituales.
Pero, seguirá progresando por cuanto, aún,
tiene la eternidad presente por delante: el eterno ahora, y jamás agotará todo
el progreso que aún queda por alcanzar, caso contrario, la vida no tendría
sentido si en algún momento se alcanzara el tope del progreso. Si así fuera,
que habría más allá.
Siempre habrá un más allá en progreso, por
cuanto dentro de cada ser, en los cuatro reinos naturales, existe una parte
indivisa de la Divinidad que posee todo lo que la Divinidad posee, pero en
estado de potencialidad infinita, cuya experiencia para desarrollar dicha
potencialidad jamás encontrará fin. En cada etapa o fase alcanzada, percibirá
la siguiente que le está esperando. Es la eterna polarización.
Dios no ha querido que nada quede estático,
tanto es así que todos los mundos del universo un día dejarán de existir y
serán sustituidos por nuevos mundos. Nos llega, aún, la luz de mundos que se
han extinguido hace muchos millones de años, o años luz, que emergieron a la
existencia, se desarrollaron, albergaron humanidades, y se extinguieron. Luego
dichas humanidades pasaron a otro mundo, nuevo, que se había formado paralelamente,
esperando a su respectiva humanidad para la etapa siguiente. La Astronomía ha
descubierto incontables mundos en formación. Lo cual indica que la expansión de
la creación universal es potencialmente infinita.
Este trabajo de expansión de
la creación universal mantendrá ocupados a todos los Espíritus de los cuatro
reinos de la naturaleza, en el eterno presente, sin límites. Siempre, cada
Espíritu, por muy avanzado que se encuentra, o grado de pureza que posea,
desarrollará su creatividad en mayor grado, y también su grado de pureza
alcanzará niveles más elevados, que no dejan de ser más que sus estados de
conciencia, en los atributos divinos, o valores universales, y sus respectivas
estaciones, o grados perceptivos, comprensivos y de realización, que van del
cero (0) grado al infinito.
Debemos agradecer las enseñanzas Espíritas
que alimentan el propio Espíritu en percepciones que les son inherentes.
Comentario en revisión.